Por Rainer Binder, Director General – Global Social Services Lead, Accenture
Los empresarios de todos los sectores tienen dificultades para encontrar el talento que necesitan. Las agencias de servicios sociales no son una excepción. Pero, ¿buscan en todas partes posibles talentos? Una investigación realizada por Accenture y la Harvard Business School señala que existe un grupo de talento que pasa desapercibido. Llaman a este grupo de personas «trabajadores ocultos». Estos «trabajadores ocultos’ están ocultos porque no cumplen los criterios convencionales de empleo. Los métodos y canales de contratación que utilizan las agencias para encontrar trabajadores los echan de menos. Sin embargo, muchos están deseosos de encontrar trabajo y poseen habilidades y atributos muy demandados por las agencias de servicios sociales.
Una oportunidad perdida
Esto es potencialmente una enorme oportunidad perdida para las agencias de servicios sociales. Los estudios revelan que los empresarios que toman medidas para localizar y contratar a trabajadores ocultos ven recompensados sus esfuerzos con creces. Casi dos tercios de los que contrataron a trabajadores ocultos declararon que su rendimiento era «significativamente mejor» que la media en seis áreas clave que más importan a los empresarios: actitud y ética laboral, productividad, calidad del trabajo, compromiso de los empleados, innovación y asistencia.
Por qué se esconden los trabajadores
¿Por qué se ocultan algunos trabajadores? Puede que no tengan la formación tradicional o que tengan largas lagunas en su experiencia profesional. Pueden tener compromisos familiares o de cuidado de personas, un estilo de vida o una ubicación que les impide acceder al empleo por las vías habituales. Los antecedentes penales o los problemas de salud mental y física también podrían excluirlos.
Caer en el primer obstáculo
Las herramientas de contratación que despliegan habitualmente las agencias de empleo, bienestar, pensiones y otros servicios sociales agravan el problema. Éstas pueden estar diseñadas para excluir a los individuos según una serie de criterios rígidos, lo que significa que los trabajadores ocultos caen en el primer obstáculo. Las descripciones excesivamente específicas de los puestos de trabajo, las prácticas laborales inflexibles y los difíciles procesos de solicitud de empleo también pueden contribuir. En general, la investigación muestra que sólo el 7% de los trabajadores ocultos consiguen obtener una oferta de trabajo a tiempo completo, y uno de cada dos que solicitan trabajo en el sector público afirma que el propio proceso de solicitud de empleo les impide presentarse.
Un enfoque inclusivo
Los organismos de servicios sociales necesitan encontrar el talento que les ayude a prestar los servicios y el apoyo que tienen una demanda elevada y creciente. Los trabajadores ocultos podrían ser una valiosa fuente de talento y habilidades para satisfacer esa necesidad. Entonces, ¿qué pueden hacer los organismos de servicios sociales de forma diferente para aprovechar esta oportunidad?
Fundamentalmente, tienen que encontrar la manera de «filtrar» a los candidatos en lugar de excluirlos antes de que empiecen. Esto podría incluir, por ejemplo, el ajuste de los filtros automáticos del proceso para que los candidatos de alto potencial que no encajen en el molde no sean descartados inmediatamente. Rediseñar el proceso de solicitud desde la perspectiva de los usuarios puede ofrecer una invitación más acogedora. Y adoptar un enfoque más amplio de las habilidades requeridas en las descripciones de los puestos de trabajo también podría ayudar a los trabajadores ocultos a ver sus habilidades como relevantes y adecuadas.
En general, está claro que las agencias de servicios sociales necesitan talento. Los trabajadores ocultos son una enorme fuente sin explotar. Ajustar los procesos de contratación podría ser la respuesta.